2 de mayo de 2015

HABLEMOS SÓLO DE BÉISBOL

Arturo Díaz


Amigos aficionados al béisbol, es muy difícil hablar de ‘uno’, pero son vivencias que he tenido durante toda mi vida en el béisbol. 

Como ‘Cronista Radiofónico de Béisbol’, el mundo me parece mucho más maravilloso de lo que puede ser.

Cuando narro un juego me siento más fuerte y animoso en torno a la vida, siento un profundo agradecimiento hacia el supremo manager de la vida, me realizo no sólo como cronista sino como persona, el béisbol me ha dado absoluta confianza en mí mismo para vencer sentimientos de inferioridad, porque me siento capaz de realizar mi trabajo, siento una fuerza dentro de mí; como pueden ser la paciencia,  el valor, la iniciativa, la energía, la guía y la comprensión que se hacen presentes en un juego de pelota.

- Paciencia; para sacar  adelante la transmisión cunando un juego de béisbol es cansado, aburrido.
- Valor; para hacer una crónica imparcial, auténtica y justa.
- Iniciativa; no esperar a que otros hagan el trabajo que a mí me corresponde realizar.
- Energía, para tener la fortaleza de entender y comprender  que nunca un juego es igual a otro.
- La guía de mis compañeros de crónica para aceptar con humildad sus apreciaciones y opiniones.
-  Comprensión,  para mis semejantes que están en el terreno de juego (umpires y jugadores) y que tratan de hacer lo mejor que pueden su trabajo profesional.

En un partido de béisbol se ve la belleza de la perfección y, yo en mi propia vida, no soy perfecto, debo tender a la perfección. El béisbol me ha dado a escoger de estar o tratar de estar alegre; porque, así como la vida puede ser una deliciosa aventura, también puede ser una vida miserable. Y me ha enseñado a hacer de mi vida, una vida feliz, gozosa e interesante.

La vida parece un juego de béisbol en donde el  ‘Supremo Manager’ nos da las señales, las que son tan claras y sencillas que quizá por eso mismo a veces no las entendemos o no queremos aceptarlas.

Entonces está en mí, hacer de mi existencia una vida feliz e interesante, como un partido de béisbol.
El béisbol me ha dado más, que un modo de hacer lo que me gusta. Me ha dado la oportunidad de desarrollar una vida a plenitud, esto es como un partido si no se está física y mentalmente preparado, la vida tampoco se puede vivir si no nos preparamos para ello. El béisbol me ha dado más de lo que merezco, porque me ha enseñado a saber más, pero esencialmente me ha preparado a ver mejor. Esto que he comentado, es sólo una mínima parte de todo lo que el ‘Rey de los deportes’ me ha regalado.

¡Discúlpenme!, pero esto es parte de mi vida y lo que pienso, para vivir lo mejor que podamos en estos tiempos tan difíciles.

Hasta la próxima, seguiremos hablando sólo de béisbol.

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