Por: Beatriz Mora
Hace algunos años, entrevistamos a doña Rosi Saac, para la sección del Personaje Popular, y algo de lo que nos compartía es lo siguiente:
“Desde que iba en la primaria, empecé a declamar y a cantar. Canté desde el primer año de primaria, empecé con canciones rancheras y luego románticas, a la gente le gustaba cómo me expresaba, hasta la fecha me piden que cante o declame algo. Lo hacia en los festivales del 10 de mayo, en la escuela, el palacio o en la radio. Ahora he dejado un poco el canto, me he dedicado más a la declamación. Cuando Teocelo cumplió cien años de haber sido declarada ciudad, hubo un concurso en Casa de Cultura, el cual consistía en componer algo sobre la ocasión. Concursé, y mi papá y yo ganamos. La composición decía lo siguiente:
Voy a contarles la historia de mi Teocelo querido
Te llevan en la memoria, gente que aquí han venido
Tenemos la puerta abierta, puedes entrar cuando quieras
Te llevaras la sorpresa al ver cosas interesantes y bellas
Ya tienes tu logotipo, que el centenario te ha dado
Es ese famoso tren y el ocelote dormido
1998, cine años hemos cumplido
El escudo que aquí vez, esta hecho de cemento
Dividido en 4 partes con todo su contenido
Y dándole la cara al cielo por todo lo recibido
Vives de tus cafetales y también de tradiciones
Bendito 15 de agosto y su 27de enero
Virgen de la Asunción y el señor Santo Entierro
Que vengan los aguaceros
Mi iglesia es ojival, mi catedral en pequeño
Estas hecho con amor, con gran esfuerzo y esmero
Echen campañas al vuelo
Ah y no se te vaya a olvidar que en 1898
A esta tierra le dieron, la categoría de ciudad
Y entre más busques más le encontrarás
Teocelo de Díaz por siempre serás.
Yo estudiaba en la Monroy, pero me llevaron a la escuela Vasco de Quiroga porque iba a hacer la primera comunión. En ese momento buscaban personas que quisieran estar en la banda de guerra, principalmente los de quinto grado y como yo cursaba ese año y me agradaba la idea, entré a la banda. Escogí como instrumento la corneta, se me hacía más fácil y sentía que cargaba menos. Nuestro instructor era Miguel Mora y otro señor de Xalapa.
Nuevamente salgo de la Vasco y llego a la Monroy para cursar el sexto año, sigo con los cantos y la poesía.
Estar en la banda de guerra fue difícil, pues fui la primera mujer en la secundaria que ha tocado corneta. Tuve que juntarme con los muchachos para jugar fútbol, hacerme su amiga e írmelos ganando poco a poco. Recuerdo que en una ocasión, me pidieron que me pusiera en la portería, pero estaba tan nerviosa que me enterré un dulce en la muela que estaba comiendo, del dolor no podía hablar y empecé a sangrar, pero se espantaron mucho porque creyeron que me habían golpeado, hasta que les expliqué que no fue así.
Hace algunos años, hubo un evento en Xalapa y yo dirigí a la banda de guerra de los maestros. Le causó asombro al Gobernador Miguel Alemán y a las personas de fuera.
Actualmente, apoyo en casa de cultura, dando clases de bordado tradicional, bordamos servilletas, manteles, colchas, fundas, semanarios, carpetas, cojines. También enseño a hacer artesanía de aforro (material que se saca de las matas de plátano), hacemos cestos, abanicos, tapetes, arreglos para la pared y recuerdos.
Aunque nunca tomé clases, también se pintar en relieve, realce, acrílico y en aforro. También varios de mis hijos pintan. En casa tenemos varias pinturas de Teocelo, que sacamos de fotografías antiguas.
Además, hacemos máscaras a través de la alfarería, tenemos alrededor de 80 máscaras, son hechas de barro, yo las hago y mis hijos las pintan. Asimismo elaboramos arreglos de novias o quince años con masa rusa o migajón”.
Doña Rosi también es conocida por las ofrendas de día de muertos que pone en su casa, y el nacimiento en navidad, para el cual ella misma hace los Reyes Magos de papel Mache, del tamaño real de una persona. Algunos de los lugares a los que ha ido a exponer sus artesanías son: Alto lucero, Naolinco, Xalapa, Veracruz y Córdoba.
Felicitamos a doña Rosi por ser una mujer que promueve la cultura y el rescate de las tradiciones en su comunidad. Puede localizarla en la calle de Rubén Darío número 28.
“Desde que iba en la primaria, empecé a declamar y a cantar. Canté desde el primer año de primaria, empecé con canciones rancheras y luego románticas, a la gente le gustaba cómo me expresaba, hasta la fecha me piden que cante o declame algo. Lo hacia en los festivales del 10 de mayo, en la escuela, el palacio o en la radio. Ahora he dejado un poco el canto, me he dedicado más a la declamación. Cuando Teocelo cumplió cien años de haber sido declarada ciudad, hubo un concurso en Casa de Cultura, el cual consistía en componer algo sobre la ocasión. Concursé, y mi papá y yo ganamos. La composición decía lo siguiente:
Voy a contarles la historia de mi Teocelo querido
Te llevan en la memoria, gente que aquí han venido
Tenemos la puerta abierta, puedes entrar cuando quieras
Te llevaras la sorpresa al ver cosas interesantes y bellas
Ya tienes tu logotipo, que el centenario te ha dado
Es ese famoso tren y el ocelote dormido
1998, cine años hemos cumplido
El escudo que aquí vez, esta hecho de cemento
Dividido en 4 partes con todo su contenido
Y dándole la cara al cielo por todo lo recibido
Vives de tus cafetales y también de tradiciones
Bendito 15 de agosto y su 27de enero
Virgen de la Asunción y el señor Santo Entierro
Que vengan los aguaceros
Mi iglesia es ojival, mi catedral en pequeño
Estas hecho con amor, con gran esfuerzo y esmero
Echen campañas al vuelo
Ah y no se te vaya a olvidar que en 1898
A esta tierra le dieron, la categoría de ciudad
Y entre más busques más le encontrarás
Teocelo de Díaz por siempre serás.
Yo estudiaba en la Monroy, pero me llevaron a la escuela Vasco de Quiroga porque iba a hacer la primera comunión. En ese momento buscaban personas que quisieran estar en la banda de guerra, principalmente los de quinto grado y como yo cursaba ese año y me agradaba la idea, entré a la banda. Escogí como instrumento la corneta, se me hacía más fácil y sentía que cargaba menos. Nuestro instructor era Miguel Mora y otro señor de Xalapa.
Nuevamente salgo de la Vasco y llego a la Monroy para cursar el sexto año, sigo con los cantos y la poesía.
Estar en la banda de guerra fue difícil, pues fui la primera mujer en la secundaria que ha tocado corneta. Tuve que juntarme con los muchachos para jugar fútbol, hacerme su amiga e írmelos ganando poco a poco. Recuerdo que en una ocasión, me pidieron que me pusiera en la portería, pero estaba tan nerviosa que me enterré un dulce en la muela que estaba comiendo, del dolor no podía hablar y empecé a sangrar, pero se espantaron mucho porque creyeron que me habían golpeado, hasta que les expliqué que no fue así.
Hace algunos años, hubo un evento en Xalapa y yo dirigí a la banda de guerra de los maestros. Le causó asombro al Gobernador Miguel Alemán y a las personas de fuera.
Actualmente, apoyo en casa de cultura, dando clases de bordado tradicional, bordamos servilletas, manteles, colchas, fundas, semanarios, carpetas, cojines. También enseño a hacer artesanía de aforro (material que se saca de las matas de plátano), hacemos cestos, abanicos, tapetes, arreglos para la pared y recuerdos.
Aunque nunca tomé clases, también se pintar en relieve, realce, acrílico y en aforro. También varios de mis hijos pintan. En casa tenemos varias pinturas de Teocelo, que sacamos de fotografías antiguas.
Además, hacemos máscaras a través de la alfarería, tenemos alrededor de 80 máscaras, son hechas de barro, yo las hago y mis hijos las pintan. Asimismo elaboramos arreglos de novias o quince años con masa rusa o migajón”.
Doña Rosi también es conocida por las ofrendas de día de muertos que pone en su casa, y el nacimiento en navidad, para el cual ella misma hace los Reyes Magos de papel Mache, del tamaño real de una persona. Algunos de los lugares a los que ha ido a exponer sus artesanías son: Alto lucero, Naolinco, Xalapa, Veracruz y Córdoba.
Felicitamos a doña Rosi por ser una mujer que promueve la cultura y el rescate de las tradiciones en su comunidad. Puede localizarla en la calle de Rubén Darío número 28.
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