17 de julio de 2012
DIEZ REGLAS DE ORO PARA BIEN ALIMENTAR
Verónica Carrillo
Para evitar enfermedades gastrointestinales en chicos y grandes debemos ser muy cuidadosas cuando cocinamos y al momento de elegir los alimentos. Durante toda la vida la nutrición juega un papel importante en el desarrollo de nuestros hijos. Prestemos mucha atención a lo que les damos de comer y a la forma en que lo preparamos .
Les doy las 10 claves sobre la alimentación de los niños que la Asociación de Empresas de Nutrición Infantil de Argentina recomienda. Todas tienen que ver con la forma de manipular y cocinar los alimentos para reducir cualquier riesgo de contaminación.
Amamantar hasta los dos años o más. La leche materna es el primer alimento y debes mantenerla como única forma de alimentación durante los primeros seis meses. Los médicos recomiendan que le sigas dando el pecho hasta los dos años o más, pero complementado con otros alimentos, ya que la leche materna es insuficiente para atender las necesidades nutricionales del niño.
Prepara la cantidad justa de comida. Mientras los alimentos cocidos se enfrían a temperatura ambiente, los microbios proliferan. Cuanto más esperes para consumirlos, más el riesgo de contaminación. Prepara la comida que consuma en el momento.
Es preferible que no guardes la comida de tu bebé. Para reservar alimentos cocidos tienes que prever su correcto almacenamiento. Los alimentos cocidos no pueden enfriarse por dentro tan rápido como lo desees (la parte central sigue caliente por más tiempo) por lo que los microbios proliferan y alcanzan una concentración que puede enfermar.
Recalienta bien los alimentos cocidos. Esta regla es la mejor medida de protección contra los microbios que pueden haber proliferado durante su almacenamiento.
Utiliza agua potable o hervida. Ten cuidado con el agua que utilizas para preparar la comida. El uso de agua potable es tan importante para preparar los alimentos como para beber. El agua debe hervir antes de añadirla a los alimentos o de transformarla en hielo.
Cocina bien las carnes y otros alimentos. Muchos alimentos crudos (en particular el pollo y la carne) pueden estar contaminados por agentes patógenos. Para eliminarlos la cocción de la comida debe ser muy buena.
Evita el contacto entre alimentos crudos y cocidos. Un alimento bien cocido puede contaminarse si tiene el más mínimo contacto con otros crudos. Esta contaminación cruzada puede ser directa, como sucede con la carne cruda de pollo o de res a que entra en contacto con alimentos cocidos. La contaminación también puede ser indirecta. No hay que hay que preparar jamás un pollo crudo -por ejemplo- y usar después la misma tabla y el mismo cuchillo para cortar el ave cocida, porque resurgen los riesgos de contaminación microbiana.
Lávate bien las manos antes de empezar a cocinar. Acostúmbrate a lavar muy bien tus manos con agua y jabón antes de empezar a preparar los alimentos y después de cualquier interrupción (para cambiar los pañales al bebé, ir al baño, sacar la basura). Si estuviste preparando alimentos crudos como pescado, carne o pollo, lávate las manos antes de manipular otros productos alimenticios.
Mantén limpias todas las superficies de la cocina. Para evitar que los alimentos se contaminen mantén perfectamente limpias todas las superficies utilizadas para prepararlos. No te olvides de que cualquier desperdicio, migaja o mancha puede ser reservorio de gérmenes. Mantén limpios y desinfectados los paños y rejillas que entren en contacto con platos o utensilios.
Lejos de insectos y roedores. La mejor medida de protección es guardar el pan y los productos alimenticios en recipientes cerrados. Un descuido puede crear en tu familia un problema de salud.
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1 comentario:
Para mantener una dieta saludable lo mejor es estar atentos a todas las novedades de comida para bebes: www.nutri-baby.com
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