Oscar León
Apenas hace unos días retiraron la pinta de una barda donde aparecía el lema que usó en campaña el actual alcalde de Coatepec y que reza: “De tu seguridad yo me encargo”. ¡Vaya broma del destino¡ pues justamente durante estos últimos meses la inseguridad ha crecido de forma alarmante. Hechos inéditos como la suspensión del desfile de los jardines de Niños, el pasado 13 de septiembre; así como la ceremonia del grito de Independencia que fue prácticamente acéfala y en la que tuvieron que “obligar” a los trabajadores del Municipio, para que hubiera algo de público. Así está el panorama en este municipio, que ha visto un incremento de robos, asaltos y hasta balaceras, de lo cual la gente sólo la refiere como un rumor, sin atreverse a asegurar nada, por miedo e intimidación, de modo que mejor hace el papel de observador.
Las lluvias de los últimos meses, aunado a los pésimos trabajos realizados por quienes laboran en la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento de Coatepec, provocaron el derrumbe de una barda de un particular ubicada en las calles de Xicoténcatl esquina con Constitución. A la fecha continua cerrado a la circulación uno de los dos carriles de esta importante ruta. Por lo menos un mes lleva abierta otra reparación a cargo de la Comisión de Agua que se ubica en la esquina de la calle Benito Pérez Galdós y Octavio Paz de la Col. Manantiales, aún no ha quedado reparado.
Han transcurrido los primeros nueve meses de la actual administración municipal y todavía no se ve el arranque de la obra del libramiento de la ciudad. Ya hay voces que empiezan a dudar de la posibilidad de la construcción. Desde luego que corresponde a la ciudadanía ejercer la presión necesaria para que se cumpla esta promesa de varios alcaldes anteriores que sólo han mentido sobre el tan traído libramiento.
Son varios las presiones que vive la comunidad de la región ya que es notorio el cambio de actitud y de conducta de la gente. En otro tiempo se tenía como rasgo típico la hospitalidad, la camaradería y el ser buen anfitrión. Circunstancia que ha desaparecido y hoy la gente mejor se esconde, cierra las puertas y coloca mejores rejas de seguridad por miedo a que les pase algo. Poca gente sale por las noches a lugares públicos y prefiere hacerlo durante el día y regresa a su casa. El número creciente de asalto y de robos a casa habitación se ha incrementado de forma escandalosa, sin que la autoridad logre poner tras las rejas a los delincuentes.
Con la llegada de la cosecha de café, llegan también los robos del fruto. Esperemos que el mecanismo implementado por las alcaldías de la zona rinda buenos resultados y se logre ahuyentar a los amigos de lo ajeno. La credencialización es la alternativa para que los productores recuperen parte de la inversión realizada para mantener en buen estado las fincas y logren una buena cosecha. También esperan un precio razonable del grano, que afortunadamente aún abunda en la región.
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