Aún no estamos en temporada de estiaje y los municipios de la región ya enfrentan serios problemas de escasez de agua total. Cada municipio tiene su particularidad:
en la mayoría el principal problema es la escasez del vital líquido, en otros son las cuotas, en otros más las redes de tuberías obsoletas, los tandeos, etc.
Hace unos días un especialista en la materia, el investigador del Instituto Politécnico Nacional, Miguel García Reyes, declaró que la escasez de agua es un asunto de seguridad nacional. Afirma el especialista que es un problema que hay que atender para asegurar la sustentabilidad del país. Dice el maestro Garcia Reyes que el gobierno mexicano debe establecer una política pública ya que de no resolverse, se pone en peligro el desarrollo sustentable de buena parte del territorio nacional. Explica que entre los factores que propician la crisis están: la escasez, aumento en el consumo, contaminación, distribución irregular, desperdicio y deforestación. El cambio climático, explica, además ha ocasionado que mientras en el norte se presentan sequías severas, en la región sur–sureste (Veracruz, Tabasco, Campeche, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo) hay inundaciones y graves daños a la población e infraestructura, como carreteras, puentes y viviendas.
Propone como solución a estos problemas: plantas desalinizadoras para aprovechar el agua de los océanos y volver a construir acueductos para abastecer algunas zonas del país. En nuestra zona el problema se complica por lo reducido de los presupuestos municipales. Cuando se construyo la red que lleva agua a Jalapa desde Quimixtlán, Puebla ( ) fue la mayor obra del gobierno del estado en época de Gutiérrez Barrios y Dante Delgado.
Cosautlán lleva casi 2 meses sin agua y la contratación de pipas no abastece las necesidades de la cabecera municipal. En Teocelo llevamos casi 15 años escuchando decir a los alcaldes al término de su administración “casi lo logramos” (Pérez Galindo, Federico May Lovillo, y Rogelio Martínez) pero la solución no llega. El ayuntamiento actual que encabeza Oscar Hernández de la Cruz, no tiene proyecto alternativo adicional a los que ya fracasaron (Cocoxatla y Texín). Xico tiene airadas protestas por el incremento a las tarifas. Coatepec no tiene problema de escasez pero la calidad del agua no es óptima. También ahí la gente de escasos recursos se ha inconformado cuando las cuotas se elevan. Jalcomulco y Apazapan enfrentan también problemas de escasez y se sabe de buena fuente que tienen en la mira los manantiales de la comunidad de la Isla del municipio de Teocelo. Manantiales que no han sido aprovechados por el municipio de Teocelo y que podrían ser explotados por esos municipios, pues el agua llega a esos lugares por gravedad.
Ante esta situación las empresas que venden garrafones de agua purificada tienen un negocio muy redituable. Hay garrafones que van de $7.50 hasta $21.00. Sin embargo no todas las familias pueden comprar agua purificada, muchos llenan recipientes en manantiales cercanos, otros la hierven.
Muchas veces hemos escuchado la frase: “Las próximas guerras entre países no serán por el petróleo; sino por el agua”. Por lo pronto ya hay conflictos entre estados de la republica, entre municipios, entre vecinos y hasta entre familiares. Quienes saben de esto afirman que las tarifas actualmente son muy bajas y que deben readecuarse conforme los costos de infraestructura y mantenimiento. También es necesario definir varias cuotas en las tarifas: no debe pagar lo mismo un domicilio con una llave y un tanque para el consumo mínimo, que quienes tienen granjas, beneficios, lavado de autos y otros giros donde el consumo es mayor. El problema de escasez en cada municipio no sólo se resolvería con elevados recursos económicos, sino con la colaboración y concientización de la ciudadanía. No se pueden seguir lavando banquetas u automóviles a manguerazos, son necesarios programas integrales de participación y educación ambiental y ecológica.
(16 de febrero de 2008)
en la mayoría el principal problema es la escasez del vital líquido, en otros son las cuotas, en otros más las redes de tuberías obsoletas, los tandeos, etc.
Hace unos días un especialista en la materia, el investigador del Instituto Politécnico Nacional, Miguel García Reyes, declaró que la escasez de agua es un asunto de seguridad nacional. Afirma el especialista que es un problema que hay que atender para asegurar la sustentabilidad del país. Dice el maestro Garcia Reyes que el gobierno mexicano debe establecer una política pública ya que de no resolverse, se pone en peligro el desarrollo sustentable de buena parte del territorio nacional. Explica que entre los factores que propician la crisis están: la escasez, aumento en el consumo, contaminación, distribución irregular, desperdicio y deforestación. El cambio climático, explica, además ha ocasionado que mientras en el norte se presentan sequías severas, en la región sur–sureste (Veracruz, Tabasco, Campeche, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo) hay inundaciones y graves daños a la población e infraestructura, como carreteras, puentes y viviendas.
Propone como solución a estos problemas: plantas desalinizadoras para aprovechar el agua de los océanos y volver a construir acueductos para abastecer algunas zonas del país. En nuestra zona el problema se complica por lo reducido de los presupuestos municipales. Cuando se construyo la red que lleva agua a Jalapa desde Quimixtlán, Puebla ( ) fue la mayor obra del gobierno del estado en época de Gutiérrez Barrios y Dante Delgado.
Cosautlán lleva casi 2 meses sin agua y la contratación de pipas no abastece las necesidades de la cabecera municipal. En Teocelo llevamos casi 15 años escuchando decir a los alcaldes al término de su administración “casi lo logramos” (Pérez Galindo, Federico May Lovillo, y Rogelio Martínez) pero la solución no llega. El ayuntamiento actual que encabeza Oscar Hernández de la Cruz, no tiene proyecto alternativo adicional a los que ya fracasaron (Cocoxatla y Texín). Xico tiene airadas protestas por el incremento a las tarifas. Coatepec no tiene problema de escasez pero la calidad del agua no es óptima. También ahí la gente de escasos recursos se ha inconformado cuando las cuotas se elevan. Jalcomulco y Apazapan enfrentan también problemas de escasez y se sabe de buena fuente que tienen en la mira los manantiales de la comunidad de la Isla del municipio de Teocelo. Manantiales que no han sido aprovechados por el municipio de Teocelo y que podrían ser explotados por esos municipios, pues el agua llega a esos lugares por gravedad.
Ante esta situación las empresas que venden garrafones de agua purificada tienen un negocio muy redituable. Hay garrafones que van de $7.50 hasta $21.00. Sin embargo no todas las familias pueden comprar agua purificada, muchos llenan recipientes en manantiales cercanos, otros la hierven.
Muchas veces hemos escuchado la frase: “Las próximas guerras entre países no serán por el petróleo; sino por el agua”. Por lo pronto ya hay conflictos entre estados de la republica, entre municipios, entre vecinos y hasta entre familiares. Quienes saben de esto afirman que las tarifas actualmente son muy bajas y que deben readecuarse conforme los costos de infraestructura y mantenimiento. También es necesario definir varias cuotas en las tarifas: no debe pagar lo mismo un domicilio con una llave y un tanque para el consumo mínimo, que quienes tienen granjas, beneficios, lavado de autos y otros giros donde el consumo es mayor. El problema de escasez en cada municipio no sólo se resolvería con elevados recursos económicos, sino con la colaboración y concientización de la ciudadanía. No se pueden seguir lavando banquetas u automóviles a manguerazos, son necesarios programas integrales de participación y educación ambiental y ecológica.
(16 de febrero de 2008)
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