Carlos Lucio
El compendio más actualizado sobre inteligencia militar del país, murió.
El general Mario Arturo Acosta Chaparro Escapite, deja una herencia difícil de entender, de aplicar, de igualar o de separar.
Acusado, sometido a consejo de guerra, procesado y sentenciado por narcotráfico, asesinato, tortura y desaparición de guerrilleros, luego condecorado por su patriotismo, lealtad y abnegación al servicio de México.
No era soldado común y corriente.
Tomó cursos de paracaidismo y fuerzas especiales en Port Benning, Georgia, y en Fort Braggs, Carolina del Norte, egresado con el rango de boina verde, termino usado en referencia a miembros de unidades o fuerzas de operaciones especiales, expertos en el manejo de explosivos, demoliciones, transmisión, paracaidismo, empleo de armas de distinto calibre y pequeñas piezas de artillería.
La boina verde es "un signo de excelencia, una placa de valor, una marca de distinción en la lucha de la libertad", definió el primer presidente católico de los Estados Unidos de Norteamérica, John F. Kennedy, en 1961.
Estudió en la Escuela de las Américas, establecida en Panamá y luego trasladada al Fort Benning, Georgia, la cual se conoce con el nombre de Instituto del Hemisferio Occidental para la Cooperación en Seguridad.
Merecedor de portar la boina púrpura, otorgada por la Escuela Kaibil, de Guatemala. Egresado del Instituto de Inteligencia y Servicios Especiales (Mossad), de Israel. Entrenado por los Gurkhas, soldados nepaleses, caracterizados por la bravura con que usan el kukri, puñal de hoja curva. Famosos por cortar los dedos a los prisioneros durante interrogatorios y luego comérselos.
Uno de los contados militares mexicanos con más experiencia en el exterminio de grupos de izquierda. Parte clave en la Sección Segunda del Estado Mayor de la secretaria de la Defensa Nacional (Sedena), especializada en tareas específicas de inteligencia.
Autor del manual de ambientación "Movimientos subversivos en México", cerca de 400 páginas, editado por la Sedena en 1990. Cinco años más tarde entregó sus archivos al Estado Mayor de la Sedena en 1995, editado en tomo de 300 páginas denominado "Manual de ambientación sobre el levantamiento zapatista", iniciado el primero de enero de 1994 en el Estado de Chiapas, coincidió con la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio, firmado por Canadá, Estados Unidos de Norteamérica y México.
Los manuales para oficiales y jefes de las fuerzas armadas en combate a la guerrilla izquierdista, tenían el propósito de identificar y ubicar a grupos radicales para después "desactivarlos".
El 17 de marzo de 1981, tomó posesión de la dirección general de Seguridad Pública del Estado de Veracruz. Mantuvo a raya la cadena de asaltos a líneas de autobuses de pasajeros, secuestro de taxis, robo a mano armada a instituciones bancarias, asaltos a transportes de carga y contribuyó al descenso de los elevados índices de criminalidad, sin el apoyo de la secretaría de la Defensa Nacional o el respaldo de la secretaría de Marina.
Treinta días antes de renunciar entrego informe de un poco más de treinta páginas mecanografiadas a renglón seguido al titular de la Sedena y copia al entonces gobernador Agustín Acosta Lagunes, en el cual exponía los motivos técnicos y causas administrativas de la separación del cargo.
El 50 por ciento de los efectivos no sabía leer ni escribir, el 40 por ciento contaba con instrucción primaria iniciada, carecían de curso de capacitación y actualización, el 90 por ciento no daban mantenimiento básico a las armas y las municiones contaban con más de veinte años de no ser utilizadas.
El arsenal de armas largas estaba conformado por fusiles alemanes de repetición manual con sistema de cerrojo marca Mauser, modelo 98K, dotados de bayoneta calada y peines de cinco cartuchos con poder de impacto a una distancia de un kilómetro con 400 metros.
La seguridad pública de aquel Veracruz estaba en manos de fusiles de repetición inventados por el armero alemán Paul Mauser en 1898, y después utilizados durante la primera y le segunda Guerra Mundial, en una época en la que predominaban las armas automáticas.
Acosta Chaparro formó parte del Batallón Olimpia con el nombre clave de Don Warman, creado para reprimir el movimiento estudiantil de 1968.
El consultor en materia de seguridad del Presidente Felipe Calderón Hinojosa, fue ejecutado la tarde del viernes 20 de abril del 2012, en una colonia de la ciudad de México.
Enjuiciar a Chaparro Escapite no sólo significa poner en el banquillo de los presuntos cómplices a presidentes de la república, sino también a secretarios de la Defensa Nacional. Su función era la de construir puentes entre el gobierno Federal y organizaciones delictivas. No era de esos hombres que se mueven solos. Era un militar de alto rango educado con la disciplina de recibir órdenes y conducirlas a su última consecuencia. Una institución en el sentido más amplio de la palabra.
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