16 de septiembre de 2014
AGUIJÓN COATEPECANO
Oscar León
El edificio de lo que será la escuela de enfermería se encuentra en obra negra y total abandono desde hace dos o tres administraciones municipales y no se ve interés de las autoridades por continuar los trabajos para que finalmente los estudiantes de esta carrera tengan un espacio propio para obtener la capacitación que se requiere para ser un enfermero o enfermera. Por lo pronto toman sus clases en la escuela de Bachilleres Ramírez Cabañas, por la tardes. Y su escuela duerme el sueño de los justos. La pregunta que muchos nos hacemos es, ¿Hasta cuándo van a terminar de construir ahí esa casa de estudios?
Es de llamar la atención como los fines de semana las calles de la ciudad se ven abarrotadas por llegada de autobuses foráneos que mueven, podríamos decir, a turismo electoral. Quizá la cercanía con la capital motive a que se ocupe este lugar para hacerse visible aquel aspirante a una candidatura para la Diputación local, cuyas elecciones están a la vuelta de la esquina. Ya empiezan a circular los acarreos, las despensas y toda clase de regalitos para convencer a un grupo de personas que son utilizadas como escalón para que alguien suba y después ni los pele...
Ya se han empezado a dar uno que otro evento formal de carácter político, principalmente los que tiene que ver con los partidos y sus cambios de dirigencias. La mayoría se han visto con poca asistencia, desorganizados y desangelados. A pesar del esfuerzo que hacen los representantes para que se llenen de asistentes, no ha sido fácil. ¿Será que la gente ya no se deja engañar con presentes y baratijas? ¿O esta vez van a vender caro sus votos?
Los caminos vecinales están cada día más desastrosos e intransitables. Todo ello porque llevan años de que se les ha dado mantenimiento. Y las lluvias que han sido intensas en las últimas semana, podrían provocar deslaves y hasta impedir el paso de los vecinos hacia sus comunidades. Pero eso es lo que menos le preocupa a la autoridad. Si ni siquiera se han dignado a atender varias calles adoquinadas del centro histórico, menos van a atender a los de la periferia.
Por mucho que se quiera ocultar, si hay cierto temor entre la población, por la inseguridad. Por lo menos en esta semana, corrió el rumor de que a Juanelo lo habían secuestrado. Del tema poco se habla y se observa que los vecinos tienen miedo a salir de noche, o transitar por lugares con poca luz. La realidad es que se necesita que los ciudadanos traten de vigilarse entre ellos. Pues los policías, cada vez son menos, y da la impresión de que están confabulados con los malosos. ¡Aguas!
Uno no se explica, como es que los productos de primera necesidad vayan a la alza. Pues cada día, las madres de familia, deben hacer malabares para que el recurso alcance. Vaya que prácticamente todo ha subido de precio, pasando por las gasolinas, el gas, la luz y hasta los tomates están caros. Hasta donde vamos a llegar y hasta donde el pueblo va aguantar la simulación del gobierno, que dice una cosa, pero que en la realidad es otra.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario